
La Familia Tero cría, engorda, sacrifica y distribuye diariamente a la carnicería tradicional un cerdo que les permite diferenciarse por su calidad. Es el cerdo que criaban nuestros abuelos, lentamente, sin prisas, con una genética muy trabajada y mejorada progresivamente para ofrecer la mejor ternura i textura a la carne, con una alimentación 100% natural, basada en prensado de almendra y maíz ensilado, que le da al producto un sabor muy particular y lo convierte en la mejor opción para una dieta saludable y equilibrada.